TRATAMIENTO FACIAL
Se ha demostrado científicamente que la causa de la flacidez del rostro que aparece con el tiempo, es principalmente debida a la pérdida del volumen óseo y muscular, primordialmente en los pómulos y en la línea de la mandíbula.
Descripción
La Bioplastia, se encarga de devolver el volumen perdido en esas estructuras del rostro, provocando que los tejidos se eleven y reubiquen.
Al destacar los pómulos y resaltar la línea y el ángulo de la mandíbula se favorece el rostro en general, dándole un toque de belleza al mismo, dado que se consigue acentuar una línea fronteriza que divide al rostro del cuello.
Los rostros jóvenes también pueden beneficiarse de la Bioplastia al resaltar donde sea necesario los pómulos, mentón o la línea de la mandíbula.
1. Bioplastia o voluminización
La Bioplastia, se ha utilizado con gran éxito también, para corregir aquellos defectos que particularmente han sido difíciles de tratar por medio de la cirugía plástica tradicional. Es aplicada profundamente debajo de los músculos del rostro, haciendo que sean éstos y no las sustancias implantadas, las que le van a dar al rostro su nueva silueta de aspecto natural.
Consiste en hacer una corrección de los volúmenes de la cara con cualquiera de las sustancias de relleno descritas; Ácido Hialurónico, Hidroxiapatita Cálcica.
Estas sustancias se implantan en planos profundos por lo que el proceso es muy poco agresivo, el paciente puede regresar a casa inmediatamente después del tratamiento.
2. Radiofrecuencia
Tratamiento para mejorar la calidad de la piel. Es además, un tratamiento muy eficaz contra la flacidez.
Durante el tratamiento se calentará con precisión una área de la capa profunda de la piel, mientras simultáneamente se enfría la parte más superficial. Al calentarse la capa más profunda, se induce una reacción natural, con la siguiente producción de colágeno nuevo.
Tras el tratamiento puede realizar sus actividades normales, generalmente no se precisan más de seis o siete sesiones
3. Ácido Poliláctico
Es el tratamiento previo a cualquier otro rejuvenecimiento facial, recupera la estructura y elasticidad de los tejidos profundos de la cara.
Se realiza normalmente en tres sesiones, una cada mes. Se va evidenciando el aumento del grosor de la piel y el refuerzo de la misma.
4. Láser fraccional
La piel tratada con láser genera tanto colágeno que produce un efecto tensor. El rejuvenecimiento Pixel se basa en el principio de las zonas del tratamiento micro-térmico. Los pulsos de láser crean unas minúsculas zonas ablativas eliminando la epidermis y la dermis superficial.
Resumiendo: Obtenemos un tejido nuevo más sano y suave.
5. Hilos de tensión
Es una técnica sencilla y rápida que, aunque no es un acto quirúrgico en si mismo, se realiza en la consulta con anestesia local y tiene la ventaja de una cómoda y rápida recuperación permitiendo al paciente una reincorporación a su vida laboral casi inmediata.
Una vez introducidos los hilos se traccionan obteniendo así el efecto “lifting” en la zona tratada.
6. Mini-hilos
La nueva técnica Mini-Treads es regeneradora efecto lifting, se basa en la implantación de múltiples mini-hilos de polidioxanona (PDO).
7. Inductores de colágeno
Son diferentes sustancias que suelen aplicarse en el rostro o en el cuello para estimular su creación de forma natural. La función del colágeno es aportar firmeza, elasticidad y mejorar estructura de la piel.